"Año del Bicentenario, de la consolidación de nuestra Independencia, y de la conmemoración de las heroicas batallas de Junín y Ayacucho"

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CAPITULO I. PRINCIPIOS BASICOS

1. ¿Cuáles son los principios básicos en materia económica que propugna el Gobierno de Transición? En materia de política económica, el Gobierno de Transición busca “dejar la casa en orden” para que el nuevo Gobierno encuentre el 28 de julio de 2001, una economía saneada y con financiamiento asegurado para desarrollar su programa de gobierno. Para tal fin, la política económica se ejecuta siguiendo los siguientes principios básicos: política fiscal austera y disciplinada, política monetaria autónoma y disciplinada, estricta regulación y sólida supervisión bancaria, priorización de los programas sociales y la lucha contra la pobreza, política de transparencia de la gestión pública, promoción de competencia leal y honesta en el mercado.

2. ¿Qué normas e instituciones  respaldan estos principios básicos?

Las instituciones y normas que respaldan la ejecución de las políticas económicas de acuerdo con los lineamientos que se presentan a continuación son los “seguros institucionales para el desarrollo”, pilares que permitirán asegurar que en el Perú se continúe ejecutando políticas macroeconómicas responsables en un esquema de apertura al exterior y de promoción de la leal y honesta competencia en beneficio del consumidor. Estos son la política fiscal austera y disciplinada, una política monetaria autónoma y disciplinada, una estricta regulación y sólida supervisión bancaria, la priorización de los programas sociales y lucha contra la pobreza, la política de transparencia en la gestión pública y la promoción de la leal y honesta competencia en el mercado.

3. ¿Cuál es la política fiscal del Gobierno de Transición?

En materia fiscal, el Gobierno de Transición orienta sus esfuerzos a que los déficit fiscales no obstruyan al sector privado. Los déficit fiscales recurrentes han probado ser, junto con las altas tasas de inflación, uno de los flagelos más grandes que han impedido que las economías de la región alcancen tasas de crecimiento altas y sostenidas. En efecto, los déficit fiscales elevados y recurrentes tienen como principal consecuencia limitar la participación del sector privado en la economía, manteniendo bajos sus niveles de eficiencia y competitividad. Cuando el gobierno excede sistemáticamente su nivel de gastos más allá de su capacidad para generar ingresos, se presentan considerables obstáculos para el sector privado. Según el caso, la “factura” la pagan las empresas, los trabajadores e, incluso, los sectores menos favorecidos. Adicionalmente, suele suceder que parte de la “cuenta” se transfiere a las generaciones posteriores, las cuales quedan “hipotecadas” por la irresponsabilidad. En tal sentido, el Gobierno de Transición está comprometido con la aplicación de un manejo de las finanzas públicas disciplinado y ordenado, que no ahogue ni desplace al sector privado; y que tampoco comprometa a las generaciones posteriores. Para tal fin, ha decidido restaurar la disciplina fiscal y respetar escrupulosamente lo dispuesto por la Ley de Prudencia y Transparencia Fiscal y su Marco Macroeconómico Multianual [2]. De esta manera, se tiene como objetivo reducir el déficit fiscal de 3.0 por ciento del PBI en el 2000 a 1.5 por ciento del PBI en el 2001.

4. ¿Cuáles son las principales características de la política monetaria y el rol del BCR?

La experiencia hiperinflacionaria por la que atravesó el país durante la década de los ochenta, así como la sólida evidencia internacional, no dejan duda acerca de la importancia de la existencia de un Banco Central autónomo e independiente, que vele por la estabilidad monetaria. En el Gobierno de Transición, existe el convencimiento de que es adecuado que el Banco Central persiga un único objetivo antinflacionario. La claridad en materia del objetivo de política monetaria, la disponibilidad de instrumentos para tal fin, así como el alto grado de autonomía con que cuenta dicha institución ha permitido reducir, en el transcurso de la década de los noventa, la inflación en el Perú de valores de cuatro dígitos a niveles internacionalmente aceptados de menos de 4%. Este manejo debe mantenerse y fortalecerse. Para el 2001, el Banco Central de Reserva se ha propuesto mantener la inflación en un rango que fluctúe entre el 2.5 y el 3.5 por ciento.

5. ¿Cuál es la importancia de tener una sólida supervisión bancaria?

Desde un punto de vista macroeconómico, el ahorro es un elemento fundamental para el desarrollo. La importancia del ahorro radica en que éste genera los recursos que se canalizan hacia el sector  empresarial, facilitando el financiamiento de la inversión entre las distintas empresas del mercado y, por ende, promoviendo el crecimiento. Sin ahorro no hay financiamiento, y sin éste no hay inversión. Y sin inversión, por supuesto, no hay crecimiento ni generación de puestos de trabajo. Además, el ahorro es indispensable para que las personas se protejan frente a fluctuaciones inesperadas en su ingreso corriente.

Es por ello importante promover el ahorro en la economía. Le corresponde al Estado contribuir a que el ahorro esté seguro. En el Perú, la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) constituye un importante resguardo institucional para que el ahorro de los peruanos esté seguro. En esta tarea, el Gobierno de Transición está comprometido con continuar adecuando la regulación bancaria a los avances en los estándares internacionales y procurando, en la medida de lo posible, otorgar mayor flexibilidad para el desarrollo de la actividad de intermediación financiera.

6. ¿Por qué es importante priorizar los programas sociales y la lucha contra la pobreza?

El Gobierno reconoce la urgencia de crear las condiciones para que todos los peruanos, independientemente de su origen geográfico o social, tengan iguales oportunidades para participar en el desarrollo nacional y para lograr un nivel de vida adecuado mediante sus propios esfuerzos. Es decir, para que todo peruano tenga las posibilidades de ejercer plenamente sus derechos como ciudadano.

El Estado es consciente de que es necesario efectuar fuertes inversiones en cinco áreas: educación, salud, infraestructura básica, justicia y seguridad. Para poder cumplir con éstas, se requiere contar con los recursos necesarios. Para ello, es indispensable que se cuente con una Administración Tributaria eficaz, que permita obtener estos recursos sin que ello signifique ahogar a la actividad privada.  Es por ello que es tan importante contar con un ente recaudador eficiente, autónomo e independiente; y con una estructura tributaria simple, neutral y equitativa.

7. ¿En qué consiste la política de transparencia en la gestión pública?

El Gobierno de Transición es consciente que el rol de la administración pública es un factor determinante del éxito de las políticas económicas. Si el Estado se comporta de manera imprevisible aumenta el riesgo de la inversión. Si impone trámites innecesarios y demoras injustificadas o si genera sobrecostos aumenta los costos de hacer negocio y reduce la rentabilidad que puede ser esperada del negocio. Ello se vuelve especialmente relevante en el contexto de un mundo globalizado donde los países compiten entre sí como lugares de producción.

Para reducir el riesgo de la inversión y la actividad empresarial es indispensable que las condiciones y reglas de juego sean estables en el tiempo y, sobre todo, previsibles. Una manera de hacer la política económica más predecible es establecer reglas y metas de largo plazo que establezcan parámetros para el grado de discrecionalidad de los funcionarios públicos, a fin de evitar decisiones arbitrarias. Igualmente es importante que estas reglas y metas sean conocidas por los agentes económicos. Una manera adicional de mantener un entorno favorable para la inversión es con la aplicación de políticas de transparencia en el manejo de los recursos públicos que hagan posible un adecuado proceso de fiscalización por parte de los ciudadanos y que siente las bases para la posterior aplicación de mecanismos de rendición de cuentas de las autoridades.

8. ¿Por qué es importante promover la competencia leal y honesta en el mercado?

Una economía donde impera la leal y honesta competencia es una economía al servicio del ciudadano. La competencia fuerza a las empresas a evaluar permanentemente los deseos y necesidades de los consumidores para ofrecer productos que éstos prefieran, y a precios que éstos estén dispuestos a pagar. El Gobierno de Transición desea fortalecer este entorno de competencia entendiendo que, de esta manera, las empresas privadas generarán una mayor variedad de productos de mejor calidad y a menores precios. En esta tarea, la existencia de organismos reguladores como INDECOPI, OSIPTEL, OSINERG, entre otros, constituyen una garantía (“seguros institucionales”) para el ejercicio de la competencia en el mercado y contribuyen a que los beneficios de la vigencia del sistema de mercado en la economía se extiendan a todos los peruanos.